Por fin llegó el tan ansiado fin de semana en Madrid, tiempo de desconexión, reencuentro con viejos amigos, momentos en pareja, y se avecina una época de cambios. En este post os quiero hacer una pequeña reflexión sobre momentos en la vida en los que todo da un vuelco y se presentan oportunidades o trenes, como yo los llamo, en los que o te subes o los dejas pasar y no volverán jamás.
El fin de semana comenzó en el AVE Málaga-Madrid, mi medio de transporte favorito. Me da mucha tranquilidad saber que voy a estar dos horas y pico encontrándome con mis pensamientos y compartiendo una conversación que, posiblemente, en el día a día es imposible por todo lo que ocurre a nuestro alrededor.
Una vez llegados a nuestro destino, nos acomodamos en el hotel, y nos dispusimos a disfrutar a tope de lo que nos ofrecía ese fin de semana. Noche de teatro en la Sala Off del Teatro Lara con la obra «Amores Minúsculos» súper recomendable, «las grandes historias de amor, empiezan como amores minúsculos».
El Sábado hicimos una Ruta de Shopping por el Barrio de Salamanca, y el famoso callejón de Jorge Juan donde pude ver los maravillosos diseños de Isabel Marant de los que os hablé en el post de tendencias para primavera-verano 2015. Luego seguimos nuestra ruta por la zona de las Salesas, donde encontramos numerosos Mercadillos Pop-up donde puedes encontrar gangas de muchas marcas y objetos vintage. Fuimos a desembocar a la calle Fuencarral, concretamente en el mercado de San Ildefonso, no dejéis de visitarlo.
Para este largo día de shopping y momentos inolvidables de buenas conversaciones, elegí un outfit casual pero con un toque rockero. El abrigo es una adquisición de rebajas de Blanco, que ya le tenía echado el ojo en temporada, pero no me atrevía por el volumen que le da al look, aunque creo que he resuelto el conflicto con estos vaqueros pitillos en negro de Zara, que contrarrestan perfectamente el volumen de la parte superior. Las botas son en color burgundy con hebillas laterales de Pepe Jeans.
Terminamos el día con una agradable cena y copitas por el Barrio de Salamanca en el restaurante DeFilé, ambiente muy acogedor y cool.
El Domingo aprovechamos durante la mañana para visitar el Museo del Traje, algo que tenía pendiente desde el año pasado. Fue revivir todo lo aprendido durante mis estudios de Asesoría de Imagen y Personal Shopper en la asignatura de Historia de la Moda Femenina y Masculina con mis grandes profesores Anita Ruiz y Jose Airam.
Para ese día mi outfit se centraba en las tendencias que se nos presentan ya para la primavera, vuelven los 70, aunque ¿alguna vez se han ido? Vaqueros de campana de Massimo Dutti, abrigo de rebajas de Zara en un color naranja caldero, bolso de Bimba y Lola y como complemento, esta banda de lana en color camel. Las botas son de Uniqushoes, diseñadas por mí (una pena no tener foto de las botas, ya que son de color verde caqui pero con un tacón en dorado ideales, prometo enseñarlas en otro post).
Y ya iba finalizando el fin de semana en la capital, pero empezaban nuevas aventuras…normalmente el mes de Marzo a lo largo de mi vida, ha sido importante, comencé mi historia con el que hoy comparto mi día a día, llegó a nuestra vida y a la de toda mi familia lo más bonito que yo tengo que es mi hijo, comencé mis estudios de lo que hoy me apasiona y cada día me ilusiona más y más, y, como este Marzo no podía ser menos, me llega una propuesta alucinante durante este fin de semana que os estoy contando. Esa propuesta que te da vértigo, sientes un nudo en el estómago, pero a la vez piensas que no lo puedes dejar escapar. Son momentos en tu vida que tienes que decidir entre la comodidad de lo ya conocido o la intranquilidad de lo que vas a conocer, nuevos proyectos profesionales, de vida, que seguro van a cambiar el rumbo de todo. Pero, ¿quién ha dicho que esto fuera fácil?
